La madre recién hecha quería que sus salvadores conocieran a su cría.
No existe la menor duda que los paquidermos tienen una memoria destacada en el reino animal. Como tienen un comportamiento que se inclina por la convivencia e interacción en manada, muchas veces obligan a sus crías a repetir sus patrones de conducta.
Esta verdad indiscutible se aprecia en el relato de la vida de Loijuk, una elefanta que tuvo momentos apremiantes y que fue atendida por los colaboradores de Sheldrick Wildlife Trust (SWT) en Kenia cuando tenía solo 5 meses de edad y quedó huérfana.
Después que Loijuk obtuvo la fuerza suficiente para regresar a la naturaleza, la gente de Sheldrick Wildlife Trust (SWT) la pusieron en contacto con lo que podría ser su espacio habitual. Durante todo este tiempo, el vínculo con sus cuidadores humanos se hizo muy fuerte.
Todos los meses regresa para visitarlos y dejarse consentir por los trabajadores del Sheldrick Wildlife Trust (SWT). Lo que ignoraban estos trabajadores era que un día Loijuk se iba a aparecer con su cría reciente. Al parecer la dió a luz la noche anterior. Lili fue el nombre que le pusieron sus amigos humanos.
«Benjamin pudo acercarse a Lili (que se acurrucó en sus piernas), acarició su delicada piel de recién nacida y respiró en su tronco, dejándola saber quién era a través de su aroma. Los elefantes tienen una increíble memoria y sentido del olfato y nuestros guardianes a menudo respiran en los troncos de los huérfanos para que puedan reconocer quiénes son» dijo Brand Rob Robford, director ejecutivo del SWT, refiriéndose a Benjamin Kyalo.
«Loijuk se ha mantenido cerca del área alrededor de la unidad, permitiendo que nuestros guardianes verifiquen cómo se encuentra. Teniendo en cuenta que septiembre es el pico de la estación seca en Tsavo, no la más favorable de las condiciones para un nuevo bebé, estamos encantados de que Loijuk haya regresado cerca de casa para que podamos ayudarla a complementar su dieta cuando visite», añadió el director ejecutivo.
«Momentos como estos son trascendentales. Al salvar la vida de un elefante huérfano, no solo vemos que ese huérfano prospere, sino que forme una familia. Lili tiene un futuro más brillante por delante que muchos elefantes, y esperamos ver a esta pequeña niña crecer en la naturaleza» señalo el directivo.
Lili es la cría número 31 nacida de elefantes huérfanos hembra que han sido cuidados por estos profesionales. Noticias como estas son una esperanza en medio de tantas historias que involucran a las poblaciones de elefantes en todo el mundo.