Dicen que «si amas lo que haces, no tendrás que trabajar ni un solo día de tu vida», y un hombre muy especial está aquí para demostrar que es cierto.Lindon Beckford lleva más de 30 años trabajando en un hospital. Su trabajo consiste en llevar a los pacientes de la sala de operaciones a su pabellón. Puede que no parezca un puesto muy importante, pero cuando oiga lo que este hombre increíble hace por las personas a las que cuida, comprenderá que realmente marca una gran diferencia en su estancia en el hospital y la hace lo más agradable y tranquilizadora posible.Es muy consciente de que estos pacientes pueden sentirse asustados y ansiosos, por lo que siempre va un paso más allá y se asegura de que se sientan aliviados poniéndoles una sonrisa en la cara.
Lo primero que hace es presentarse a los pacientes. Les dice: «Me llamo Lindon y seré su chófer». Después empieza a hacer lo que más le gusta, y hace que sus pacientes también disfruten. Les canta. Muchos quedan tan sorprendidos por su amable acto que no pueden contener las lágrimas de alegría.Lo creas o no, hace esto por cada paciente, desde hace casi 31 años.
Ni que decir tiene que todos se sienten halagados y especiales. Dejan de pensar en sus problemas aunque sea por un rato y eso significa mucho para ellos.
Realmente hace falta alguien especial para hacer lo que hace Lindon. Definitivamente, necesitamos más gente como él en el mundo.