Hay muchas parejas en Hollywood cuyos lazos no resisten la prueba del tiempo. Me imagino lo difícil que es vivir bajo los reflectores, cuando el mundo e incluso la propia esposa documentan cada uno de tus movimientos, sin contar las críticas en las redes sociales.
Pierce Brosnan es conocido por encarnar la esencia del hombre más fascinante en la pantalla y por actuar junto a muchas de las actrices más importantes. A menudo se le describe como un verdadero Casanova, pero detrás de cámaras es un hombre de familia ejemplar y un esposo devoto.
La relación entre la estrella de James Bond, Pierce Brosnan, y la periodista, escritora y presentadora de televisión Keely Shaye Smith es algo a lo que todos podemos aspirar. Tras más de un cuarto de siglo juntos, estos apasionados compañeros aún son el uno para el otro. Su matrimonio demuestra que el amor verdadero nunca muere, a pesar de la fama, la edad y todos los cambios físicos que conlleva. Pierce y Keely han sido mejores amigos, compañeros y amantes durante casi 30 años.
La pareja comenzó a salir en 1994 y se casó siete años después de haberse conocido en un bar en México. Keely y Pierce se conocieron cuando se le pidió a ella que entrevistara a Ted Danson, y a partir de ahí empezaron a trabajar juntos. Su primera cita fue como una escena de una película romántica. Según Keely: “Estábamos sentados bajo las estrellas, él me tomaba de la mano. Sobre nosotros estallaron fuegos artificiales y Kenny Loggins cantaba. Hablamos hasta las 3 de la mañana.”
“Fue fascinante”, dijo Keely a la revista People en 2001, según informa PopSugar. “Alto, de cabello oscuro y fascinante, con todas esas cualidades que atraen la atención de inmediato. Tenía ese destello de malicia en los ojos. Pensé… ¡Wow! ¡Wow!”
Pierce comprendió de inmediato que Keely era especial. “Adoro su vitalidad, su pasión. Ella posee esa fuerza sin la cual no podría vivir. Cuando Keely me mira, me siento débil”, declaró.
Pierce y Keely se casaron en Irlanda en 2001. La idea era que la pareja se casara en el 2000, pero el hijo de 16 años de Pierce tuvo un accidente automovilístico en Estados Unidos. Debido a ello, sufrió una lesión en la columna vertebral y la boda se pospuso. Finalmente, Pierce y Keely celebraron la boda de sus sueños en el Ashford Castle, una magnífica fortaleza irlandesa del siglo XIII. Invitaron a 120 amigos cercanos y familiares a ese castillo de ensueño, y Pierce financió intensas medidas de seguridad para mantener a la prensa y al público a distancia.
Educación compartida de los hijos: La pareja tiene dos hijos, unidos por la pasión por la naturaleza. Trabajan juntos en una campaña contra la caza de ballenas y la destrucción de la vida marina. No cabe duda de que Pierce y Keely forman un matrimonio ideal: sus dos hijos nacieron poco después de que comenzaran a salir. Desde entonces, Keely continúa trabajando arduamente en su carrera, a la vez que cuida de sus hijos de manera ejemplar.
Además, ella ha cuidado con amor a los hijos de Pierce provenientes de su matrimonio anterior con Cassandra Harris, quien falleció de cáncer en 1991. Antes de conocer a Pierce, Keely Shaye Smith tenía una carrera como modelo y también fue actriz. En los últimos años, el peso de Keely ha sido ampliamente comentado, especialmente en las revistas de farándula. Probablemente todos noten que ha ganado peso, pero ¿quién no lo nota cuando uno envejece un poco?
Algunos medios especulan que Keely podría haber tenido problemas de tiroides, pero yo creo que es hermosa y radiante. Desafortunadamente, Keely suele ser blanco de comentarios maliciosos por parte de trolls debido a su físico cambiado. Mientras tanto, la estrella del 007 afirma que aún ama a su “apasionada” esposa, que “lo hace temblar”. “He encontrado una mujer maravillosa en Keely Shaye”, explicó. “Si la buscara un millón de veces, no encontraría a nadie como ella.”
Algunos tabloides de farándula han estimado que Keely ganó alrededor de 30 libras tras casarse con Pierce. Estas speculaciones han llevado a que la gente y los medios se pregunten si Pierce dejará a su esposa. Sin embargo, su matrimonio nunca ha sido objeto de rumores de infidelidad y a menudo se les ve besándose y tomados de la mano en público. Por supuesto, no es fácil enfrentarse a los trolls que comentan la apariencia de Keely y critican su cuerpo.
Pero Pierce siempre ha apoyado a su esposa y le demuestra su amor en público, demostrando cuánto la ama. Además, es sumamente refrescante ver a una mujer en Hollywood que no recurre a cirugías para parecer más joven. Keely parece segura de sí misma, y Pierce ama a su esposa tal como es.
